Durante el primer año de tu bebé, tendrás múltiples visitas al consultorio del médico para hacer un seguimiento de su salud y desarrollo. De hecho, la Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda los chequeos durante la primera semana de tu bebé y a los 1, 2, 4, 6, 9 y 12 meses de edad.
Durante estas visitas, tu bebé probablemente se someterá a varias pruebas, exámenes y evaluaciones para asegurarse que está creciendo y desarrollándose. Afortunadamente, muchas de ellas son sencillas – e incluso divertidas – para él (¡probablemente ni siquiera se dará cuenta que le están haciendo pruebas!).
¿Por qué las pruebas son importantes para los bebés?
Las pruebas y evaluaciones para cualquier niño se utilizan para controlar todas las áreas del desarrollo, como las socio-emocionales, motoras, de habla-lenguaje, cognitivas y de autocuidado. Cuando se detectan retrasos a tiempo, se puede empezar con una intervención temprana, que puede ayudar a los bebés a ponerse al día con sus compañeros en cuanto a los logros del desarrollo a lo largo del tiempo.
Pruebas recomendadas para bebés: 0-12 meses
Los siguientes exámenes son los que probablemente tu bebé tendrá durante su primer año. La mayoría de los pediatras e instituciones médicas los tratan como parte de las visitas de rutina.
Sin embargo, el pediatra de tu bebé puede hacer otras pruebas y evaluaciones adicionales de su preferencia. También es probable que recomiende más pruebas si considera que algun área del desarrollo de tu bebé puede sufrir algún tipo de retraso. En la mayoría de los casos, es una buena idea seguir el consejo del pediatra para descartar o detectar retrasos a tiempo.
Exámenes de salud de los recién nacidos
Antes de que tu bebé salga del hospital después del nacimiento, probablemente se someterá a numerosos exámenes de salud. Los hospitales realizan estos exámenes para la detección temprana de problemas de salud, como las condiciones que afectan las hormonas, la visión, la audición, la digestión, el metabolismo, los huesos y los músculos. Para la mayoría de los exámenes, un simple análisis de sangre es todo lo que el equipo médico necesita para detectar un problema y ordenar más pruebas si es necesario.
Tu pediatra probablemente continuará realizando exámenes de audición, visión y signos vitales en cada visita de rutina. La circunferencia de la cabeza, la longitud, el peso y la presión sanguínea son datos cruciales para el desarrollo de tu bebé.
Nivel de plomo en la sangre
La AAP recomienda que todos los bebés reciban una evaluación del riesgo de plomo a los 6, 9 y 12 meses, con exámenes adicionales hasta los 6 años. Una evaluación de riesgo es un rápido pinchazo en el dedo en lugar de un análisis de sangre completo. Por lo general, tu bebé solo necesitará una prueba del nivel de plomo en la sangre si muestra un resultado positivo en su evaluación de riesgo.
Pruebas sensoriales-motoras, de lenguaje y cognitivas
Estas pruebas a menudo se realizan durante cada una de las visitas de control del bebé y se conocen generalmente como control del desarrollo. El pediatra realizará varios ejercicios y actividades apropiados para la edad de tu bebé para asegurarse que está cumpliendo con los logros importantes. El médico puede realizar una evaluación más estandarizada durante o cerca de la visita de los 9 meses del bebé, a menudo conocida como evaluación del desarrollo.
La mayoría de las tareas serán justo lo que se espera ver en un chequeo de rutina. Por ejemplo, el médico confirmará si tu bebé puede enfocar los objetos a corta distancia a los 3 meses. También puede intentar que tu bebé imite sonidos, como «Whoosh» y «Meow» en su visita de rutina a los 9 meses.
Pruebas socio-emocionales
Los exámenes socio-emocionales pueden ayudar a los médicos a conocer cualquier problema mental o de comportamiento que pueda retrasar el desarrollo socio-emocional. Algunos pediatras empiezan a hacer pruebas de detección del autismo antes de los 12 meses si ven algún signo de advertencia.
El pediatra se tomará el tiempo necesario durante cada visita de rutina para preguntarte sobre las interacciones de tu bebé contigo y con otras personas, su temperamento, sus intereses y cualquier otra cosa relacionada con su desarrollo socio-emocional. El ASQ®:SE-2 es una herramienta de evaluación estándar que los pediatras utilizan para evaluar áreas como el autocuidado, la autorregulación y la comunicación.
Elegir un pediatra que se concentre en cada área de desarrollo en cada visita de rutina es beneficioso para tu bebé. Asegúrate de encontrar uno que sea minucioso, que valide y aborde tus preocupaciones y que haga que tú y tu pequeño se sientan cómodos.